El panorama económico y de empleo en Colombia va de descenso en descenso, pues el aumento de desocupación en el país no es un hecho aislado para los colombianos, quienes llevan una tasa de desempleo por encima del 10% durante casi 15 años. En los últimos años la cifra de desempleo ha tenido un crecimiento constante, que ha causado preocupación entre economistas y analistas del país.
Según un análisis del Dane, en marzo la tasa de desempleo se ubicó en 10,8%, es decir, 1,4 puntos porcentuales más que en el mismo mes del año pasado. Muchas son las razones que pueden generar este flagelo, entre ellos, los emigrantes, la poca evolución de firmas nuevas las cuales muchas veces se quedan en una papel al crearlas, el aumento del salario mínimo en un 6% de las centrales obreras, y otros factores, hacen que la baraja de posibilidades en el mercado laboral preocupe al Gobierno y a las autoridades de política económica.
El mismo presidente Iván Duque señaló, en su momento, que el acuerdo logrado del salario mínimo representaba que el país tuviese el aumento más elevado en los últimos 25 años, si se tiene en cuenta que el alza real, descontando la inflación, sí se ubicaba en el tope de los incrementos, tanto los hechos por acuerdo como de forma unilateral.
Algunos expertos no están de acuerdo con esta posición, y en su lugar señalan que las razones reales de la situación de empleabilidad en el país serían más profundas.