Ante la explosión de empresas tecnológicas y aplicaciones que ofrecen servicios financieros (Fintech) han surgido distintos desafíos con relación a la regulación y la seguridad, entre muchos otros aspectos.
Un informe de la Federación Latinoamericana de Bancos (Felaban), señala que “si bien resulta importante que existan nuevos actores que fomenten la competencia, resulta claro mencionar que la aparición de dichas entidades encarna riesgos reales y tangibles para la industria financiera”.
Según la entidad, si bien la aparición de estos jugadores representa nuevas opciones de crédito, la realidad es que esto no significa mejores servicios financieros.
“Estos oferentes nuevos de crédito no son monitoreados por ninguna autoridad. Nadie conoce sus prácticas, sus criterios de otorgamiento de crédito y sus políticas de prevención de programas financieros”, dice, y añade que es importante tener en cuenta la protección al consumidor.
En tanto, considera que “en etapas iniciales esto puede atraer inversionistas al mundo del crédito que no entienden el negocio y sus posibles bemoles”.
Por otra parte, Felaban señala que al hacer uso de algoritmos y otros mecanismos automatizados, es difícil hacer seguimiento a lo que ocurre en materia de oferta y demanda de crédito.
Otro tema que apunta es que con tantos jugadores por fuera del sistema formal, se reduce la capacidad de las decisiones de política monetaria para intervenir en la economía ciando sea necesario.
Finalmente, indica que hay desafíos en materia de seguridad de los datos y en materia de arbitraje regulatorio, pues las nuevas firmas aún no experimentan los costos de las normas que tienen las entidades tradicionales.
De todas maneras, cabe recordar que muchos grupos bancarios han decidido aliarse o adquirir firmas de Fintech para el desarrollo de más productos y servicios, así como para mejorar los canales de atención.