Las preocupaciones que causa la técnica «Deepfakes»
Vivimos en una era en la que las alteraciones en las imágenes son cada vez más elaboradas y las noticias falsas que se generan con base a ellas son aún mas.
Photoshop es una de las herramientas más revolucionarias de los últimos tiempos, pero de acuerdo a su uso puede ser potencialmente peligroso.
El ejemplo más conocido se dio recientemente, con el falso video del creador de Facebook, Mark Zuckerberg, donde dice que es dueño de «todos sus secretos», mensaje que nunca pronunció Zuckerberg sino que era pieza creada por una agencia para un proyecto artístico pero que a simple vista resulta tan realista que es difícil identificar si es falso o verdadero.
Se trata de las ahora denominadas ‘deepfakes’, una técnica de inteligencia artificial basada en sintetizar la imagen humana combinando y superponiendo imágenes creadas.
Los deepfakes están diseñados para engañar al ojo humano. Es como generar una capa artificial sobre la boca de alguien y luego mimetizar la animación sobre un video real. El sistema se encargará de las sombras en el ambiente, la gesticulación y los ángulos del rostro de la persona.
Esta técnica comienza a hacer cada vez más popular y demuestra en este momento que pueden ser inofensivas, pues muchos lo usan para divertirse pero, eventualmente pueden ser potencialmente peligrosos, al poner a cualquier persona a decir lo que se quiera.
Como a líderes políticos que puedan «confesar» delitos o incluso, declarar una guerra, desatando todo tipo de catástrofes a nivel mundial.
A raíz de eso, Photoshop anunció que sus expertos diseñaron un método que detecta las ediciones en imágenes trucadas con gran exactitud.
Y es que, ¿quién no ha caído en alguno que otro ‘fake’ al observar imágenes que aparentan ser legítimas, pero que al final son puros montajes? Todos.
Con el nuevo método de Photoshop, se podrá detectar las alteraciones de las imágenes en un 99%, logrando identificar qué cambios se le hicieron a una foto en comparación con su original.
Adobe aseguró que no planea hacer comercial esta nueva herramienta, pues sus implicaciones y desarrollo podrían ser de gran utilidad en el futuro, sobre todo por la era en la que vivimos.
