Los mercados financieros emitieron alerta sobre las perspectivas económicas para Reino Unido y Estados Unidos, lo que se le conoce como «curva de yield invertida» o «curva de rendimientos invertida».
Si esta curva está invertida, significa que a los gobiernos de esos países les sale más barato pedir dinero a un plazo de 10 años que a dos.
Los mercados financieros emitieron alerta sobre las perspectivas económicas para Reino Unido y Estados Unidos, lo que se le conoce como «curva de yield invertida» o «curva de rendimientos invertida».
Si esta curva está invertida, significa que a los gobiernos de esos países les sale más barato pedir dinero a un plazo de 10 años que a dos.
Pero lo alarmante de la dinámica, es que además de ser inusual, suele ocurrir antes de una recesión o, al menos, de una desaceleración significativa en el crecimiento económico.
Pero, ¿qué es la curva de yield?
Esta señal de advertencia proviene del mercado de bonos, una promesa de hacer ciertos pagos en el futuro, donde gobiernos y empresas piden dinero prestado a través de la venta de bonos.
La cantidad que los inversores pagan por el bono determina el interés que obtendrán: cuanto mayor sea el precio, menor será el interés.
No obstante, lo inusual es que los intereses del gobierno de Reino Unido (gilts, como se les conoce) y de EE.UU. con dos años de vencimiento fue superior al rendimiento de los bonos a 10 años.
Esta situación se ve como una señal de que los inversores prefieren los retornos asegurados por tener un bono a más largo plazo y están preocupados por las perspectivas a corto plazo para la economía.