Los “elefantes blancos” están apareciendo cada vez más en Colombia.
Pues más de $3,2 billones de pesos de inversión en 13 proyectos de infraestructura del país están sin concluir.
Según la Contraloría General de la República, este paquete de proyectos se encuentra en estado crítico, al haber presentado algún tipo de retraso, suspensión, prórroga “u otra situación que impida la finalización oportuna” del mismo.
Es decir, excusas tras excusas para cubrir casos de corrupción.
Alguna de las obras olvidadas son, por ejemplo, el aeropuerto El Embrujo, en la Isla de Providencia, que tiene una inversión de $68.200 millones, ha sido suspendido y prorrogado en varias ocasiones.
Otro proyecto que tiene seguimiento de la Contraloría es el Aeropuerto Internacional Alfredo Vásquez Cobo, en Leticia, el cual se viene ejecutando desde 2014, a pesar de que el plazo contemplado para la obra era de 33 meses. Es decir que debía haberse culminado en 2017, pero actualmente tiene un avance de 85%.
Por otro lado, las obras del Aeropuerto Antonio Nariño en Pasto, que ha costado más de $10.000 millones, debían ser entregadas en diciembre de 2018. Sin embargo, se les otorgó una prórroga y se espera que finalicen en septiembre.
Otro caso es el Aeropuerto Guillermo León Valencia de Popayán, que contempla la construcción de la terminal y la plataforma correspondiente, así como de la torre de control.
Sin embargo, la ampliación de la pista de aterrizaje se encuentra suspendida porque hay construcciones aledañas que deben ser demolidas, pero cuyo procedimiento no tiene aval de la Oficina Asesora de Planeación Municipal, ni de las curadurías urbanas.
Y así, la lista podría continuar, demostrando que son más los “elefantes blancos” en el país, donde se atraviesa la corrupción, que casos de éxitos.