En el último mes el comportamiento del dólar tiene una tendencia alcista, que aumenta tras cada anuncio entre Estados Unidos y China. Una muestra de ello fue hace dos semanas, cuando Trump anunció nuevos aranceles a productos chinos por US$200.000 millones, una noticia que subió casi $30 el valor del dólar en tan solo una jornada.
Tan solo en una jornada la tasa de cambio subió $28 y cerró en $3.3603, con lo cual ya completa un alza de más de $200 en tan solo el último mes, generando tensión del pronto récord histórico del precio del dólar, como sucedió el 11 de febrero de 2016, cuando cerró a un nivel de $3.440. Cabe mencionar que el euro también está caro, pues se sitúa por encima de los $3.761.
Es claro que la tasa de cambio es el principal comunicador de la incertidumbre internacional dentro de la economía colombiana, generando preocupación al pensar que pueden volver los tiempos en que el dólar fue noticia nacional, tal como pasó entre 2014 y 2016.
El gerente del Banco de la República, Juan José Echavarría, dijo en una rueda de prensa el pasado miércoles que “hemos visto recientemente una devaluación del peso colombiano más fuerte que en el pasado. No es nada preocupante, en el pasado hemos visto devaluaciones de hasta el 90 %. En la junta en este momento no ha habido discusiones sobre el nivel de la tasa de cambio, excepto de cómo afecta la inflación y el crecimiento. Yo pienso que vamos a dejar flotar libremente la tasa de cambio. Hemos sido bastante escépticos de que tengamos algún poder de controlar ese nivel, por eso preferimos concentrarnos en mantener una tasa de interés contracíclica para garantizar un crecimiento de mediano y una inflación cercana a nuestra meta”.