Una lesión en el muslo derecho detuvo al español Rafael Nadal este martes en los cuartos de final del Abierto de Australia, torneo que tendrá como inesperados semifinalistas al croata Marin Cilic y al británico Kyle Edmund.
El marcador ya era desfavorable al jugador mallorquín (3-6, 6-3, 6-7, 6-2 y 2-0) en el momento en el que comunicó su retirada. Hasta las tres horas y 47 minutos alargó su sufrimiento en pista, aunque ya antes había advertido de sus molestias en el muslo derecho.
«Sentí el músculo cansado en el tercer set. Después hubo una dejada en el cuarto y algo sucedió», relató en rueda de prensa.
Fue con 4-1 en el cuarto parcial cuando solicitó asistencia médica para ser atendido de esta inoportuna dolencia que le niega la posibilidad de triunfar por segunda vez en Australia.
«Siento que es una oportunidad perdida», reconoció.
Rafael Nadal ganó el primer Grand Slam de la temporada en 2009 y perdió las finales de 2012, 2014 y 2017.
Esas derrotas ante el serbio Novak Djokovic y los suizos Stan Wawrinka -ante quien compitió con una contractura en la espalda- y Roger Federer fueron dolorosas, como también lo fue la lesión que le obligó a retirarse en los cuartos de final de la edición de 2010, ante el británico Andy Murray.
Otra dolencia volvió a cruzarse en esta ocasión en su camino y frustró su prometedora trayectoria en el Rod Laver Arena, una vez asegurada su permanencia en el número uno.
Lanzado en sus compromisos precedentes ante el dominicano Víctor Estrella Burgos, el argentino Leonardo Mayer, el bosnio Damir Dzumhur y el también argentino Diego Schwartzman, el español construyó un ilusionante 3-6 ante el croata Marin Cilic.
«La rodilla estaba funcionando bien», sostuvo en su comparecencia ante los medios de comunicación. Ni en los primeros compases del envite ante el gigantón croata, ni en sus anteriores compromisos en Melbourne Park, en efecto, había dado muestras de debilidad.
Sí una vez cumplida la tercera manga de un duelo de gran exigencia ante uno de los grandes nombres del circuito masculino.
Marin Cilic, poderosísimo al servicio desde sus 198 centímetros de estatura, con 20 saques directos al final, fue campeón del Abierto de los Estados Unidos en 2014 y finalista en la pasada edición de Wimbledon.
«Quizás si hubiera tenido la oportunidad de trabajar duro, como el año pasado, esto no me hubiera sucedido», convino Nadal.
Su rodilla derecha le obligó a adelantar el final de la pasada temporada. No pudo completar la fase de grupos del Masters disputado en el londinense O2 Arena. Ya en 2018, renunció al torneo de exhibición de Abu Dabi y a la cita, ya oficial, de Brisbane.
Falto de rodaje se presentó en Melbourne y cojeando se marchó. Otra lesión fue su lastre, cuando mandaba por dos parciales a uno. De contener el saque de Cilic, pasó a sufrirlo; de mandar con su derecha, pasó a verse sometido.
Ante la imposibilidad de seguir compitiendo, Rafael Nadal asumió cabizbajo su eliminación. Su adiós en los cuartos de final deja el cuadro individual masculino sin el gran favorito.
Por la parte alta, Marin Cilic buscará su primera presencia en la final del ‘major’ australiano ante un jugador debutante en las semifinales de un Grand Slam.
Aparece por sorpresa en la penúltima fase el británico Kyle Edmund, verdugo este martes del ‘maestro’ Grigor Dimitrov.
El búlgaro, sexto cabeza de serie, fue la quinta víctima del tenista nacido en Johannesburgo, número 49 del mundo.
Antes, Kyle Edmund apeó al sudafricano Kevin Anderson (subcampeón del Abierto de los Estados Unidos en 2017), al uzbeco Denis Istomin, al georgiano Nikoloz Basilashvili y al italiano Andreas Seppi.
La segunda semifinal quedará definida este miércoles tras la disputa de los otros dos duelos de cuartos de final.
El suizo Roger Federer, último campeón en Melbourne Park, se medirá con el checo Tomas Berdych, mientras que el estadounidense Tennys Sandgren retará al surcoreano Hyeon Chung.
En el cuadro femenino, por su parte, la primera semifinalista es la belga Elise Mertens, quien permanece invicta este año.
La joven de Lovaina, de 22 años, alzó el trofeo en Hobart. En Melbourne prosigue su exitosa gira australiana.
Este martes sometió a la ucraniana Elina Svitolina, cuarta preclasificada, por 6-4 y 6-0. Sigue imbatida en el certamen y ambiciona la final: su rival será la danesa Caroline Wozniacki, segunda cabeza de serie, o la española Carla Suárez. EFE