Tommy Lee Jenkins, de 32 años, caminó desde un suburbio de Indianápolis a Wisconsin, para tener relaciones sexuales con una supuesta niña de 14 años, con la que había estado hablando en Facebook.
No obstante, Jenkins no estaría hablando con una niña de 14 años, llamada “Kylee” sino con el vicesheriff del condado de Winnebago que trabajaba con la Fuerza Especial de Delitos contra Niños en Internet.
Jenkins está acusado de usar una computadora para intentar persuadir, inducir o incitar a un menor a participar en actividades sexuales ilegales.
Por tanto, podría enfrentar 10 años de cadena perpetua si es declarado culpable el próximo 23 de octubre.
A principios de octubre, Jenkins comenzó a hablar con la “niña” y a si quería que viniera a Wisconsin. Cuando ella dijo que sí, más tarde le dijo que había comenzado a caminar desde Whitestown, Indiana, hacia donde ella estaba.
Las autoridades arrestaron a Jenkins cuando llegó, dijo la oficina del abogado.