El alcalde de Bucaramanga, Rodolfo Hernández, se reintegró al cargo suspendido a través de un fallo de tutela que emitió un juez.
El mandatario interpuso una tutela porque le habían sido violado el derecho del debido proceso al suspenderlo dentro del proceso disciplinario que se le adelanta por haber golpeado al concejal de la ciudad, Jhon Claro.
La tutela fue interpuesta contra la Procuraduría General de la Nación, la Gobernación de Santander, la Procuraduría Primera Delegada para la Vigilancia Administrativa y la Sala Disciplinaria de la Procuraduría.
Actualmente no hay claridad, sobre el destino del alcalde encargado, porque quedaron nulos los efectos de los actos administrativos que expidió la Gobernación de Santander.