Por primera vez en la historia del país es recuperado materialmente un predio de la Nación en un Parque Nacional. Ocurrió en el Parque Natural Tayrona, en donde dos predios baldíos ilegalmente ocupados, retornaron a manos del Estado.
Fue un proceso histórico adelantado por la Agencia Nacional de Tierras, entidad que recuperó materialmente los predios El Paraíso y Bukarú, que venían siendo ocupados indebidamente hace 30 años.
Cada uno tiene una extensión de 1.5 hectáreas y están ubicados en el sector de Arrecifes.
La Unidad Territorial de Parques, a cargo de Luz Elvira Angarita, reportó que el predio venía siendo habitado y explotado económicamente a través de la prestación de servicios de alojamiento y de alimentación.
La diligencia de desalojo dfue presidida por dos inspectores de Santa Marta y acompañada por la Policía Nacional, la Armada Nacional, la Procuraduría General de la Nación, la Agencia Nacional para la Defensa Jurídica del Estado, el CTI de la Fiscalía, el Ejército Nacional, así como por la Alcaldía de Santa Marta, Personería Distrital y el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar.
ANTECEDENTES
En 1989 inicia una serie de negociaciones entre particulares sobre supuestos derechos de posesión sobre El Paraíso que no podían realizarse, pues ya esos terrenos pertenecían a lo que se había declarado reserva natural en el Parque Nacional Tayrona y constituyéndose en predios de la Nación bajo protección.
Ese año el señor Plutarco Pallares, le transfirió a Jorge Higuera el dominio sobre unas mejoras realizadas por él y en su momento el Inderena inició acciones para decomisar varias construcciones rústicas levantadas en el lugar.
Sin embargo, – dice la Unidad de Parques – “Higuera no accedió a la entrega del terreno y en cambio empezó a explotarlo turísticamente pese a no contar con los permisos respectivos ni atender los criterios de capacidad de carga del predio”.
Tiempo después de haber iniciado actividades económicas y turísticas en El Paraíso, esta familia ocupó indebidamente el predio contiguo, hoy conocido como Bukarú. Desde ese momento hasta hace unos días, los dos terrenos fueron aprovechados económicamente por sus ocupantes, quienes año tras año incrementaron la explotación del área con el flujo de turistas.
Con esta recuperación, la Agencia Nacional de Tierras reafirma su compromiso con la preservación de las reservas naturales del país y con la recuperación de los terrenos que le pertenecen a la Nación.
Una vez se reciban de manera legal los predios, Parques Nacionales Naturales de Colombia, procederá a la demolición de toda la infraestructura construida en los mismos y el retiro de los escombros, dando con ello inicio a la etapa de reconformación y adecuación del terreno para adelantar procesos de restauración ecológica con especies nativas en el área afectada y con ello recuperar la conectividad de la fauna y flora del Parque Tayrona.
