La vida es de oportunidades tomadas en el momento justo. Las experiencias marcan un antes y un después para todos los que luchan por sus sueños. Y las adversidades, son esa prueba de resistencia que forma el espíritu e impulsan a continuar cuando una meta está trazada.
En el caso de Roger Martínez, se aprecian tantos matices de una vida construida desde los bajos y los altos, que escuchar a su madre, refleja el orgullo que quizás hoy sentimos todos los colombianos, con ese gol que abrió el marcador contra Argentina.
Pero, ¿Quién es Roger Beyker Martínez Tobinson?
Podríamos escucharlo de la voz de Roger, pero fue la misma Marinella Tobinson, madre del jugador, quien entre risas y pausas nos abrió sus emociones para hablarnos de él, y en ellas nos describió en minutos, gran parte de su vida, sus sueños y esperanzas.
Marinella lo define como un hombre extrovertido, apasionado por la música, los instrumentos y el baile. Como un ser espiritual, aunque no duda en aceptar que le teme a cometer errores y a estar solo.
Ella habla y al instante se siente, como la admiración se proyecta en cada palabra y afirma, que es un joven que vive y trabaja por su familia, un hombre de hogar que busca siempre la unión.
Relata como a la edad de 20 años, salió de casa en busca de su principal objetivo, ser futbolista profesional, impulsado no solo por el amor a este deporte, sino también por el hecho de hacerlos sentir orgullosos a todos.
Sin embargo, y en un tono que vivencia lo que solo una madre puede sentir ante el rechazo hacia un hijo, recuerda como antes de que el jugador se presentara al Racing de Argentina, pasó por más de 4 clubes donde solo hubo voces que lo hicieron escuchar muchas veces: “Me gusta, pero…”, “Te llamaremos luego…”, “Tienes talento, pero ahora no hay fichaje…”, frases con las que Roger comenzó a dudar de su talento y a sentir que su sueño no se cumpliría.
Este cartagenero que creció en el barrio la Campiña, lugar en el que con tan solo 1 año demostró su gusto por el fútbol, hacía de unos manguitos o una media enrollada su balón. Y a medida que el tiempo pasaba, la mayoría del día lo dedicaba a practicar, jugando en casa o en las calles junto a sus amigos Rony, Martelo, su tío Jeison y Elkin, relata jocosamente Marinella.
Y es que el talento le viene en la sangre, su padre, Roger Martínez, también jugo fútbol y ha sido una de sus principales motivaciones. Él fue quien desde los 4 años lo impulsó a entrenar y practicar el deporte.
La cancha “Los Calamares”, se convirtió en el escenario perfecto para el crecimiento del talento joven de Roger. Luego tuvo un breve paso por Academia de Crespo y de allí pasó a una escuela de formación en Medellín, llamada Estudiantil.
Creyente y aferrado a Dios, “Su reciente llamado a jugar la Copa América es una confirmación de lo que Dios le había prometido cuando era pequeño”, expresó con emoción Marinella.
Uno de sus sueños era hacer parte de la Selección Colombia, y hoy no nos cabe duda de que se cumplió, no solo al pisar suelo brasilero, sino al ponerse en la mira de todos los amantes del fútbol en cualquier lugar del mundo, gracias a la maestría con la que marcó ese tanto, aquel 15 de junio de 2019. Hoy frente a Qatar esperamos que siga contando su historia.
Escucha las palabras de Marinella Tobinson en exclusiva para El Planeta.co
