Este lunes 23 de octubre, los taxistas iniciaron un paro indefinido en Bogotá para que la Superintendencia de Industria y Comercio tome acciones a la denuncia que se hizo contra Uber y Cabify para regularlos como servicio de transporte especial.
Desde hace meses, directivos del gremio, de las plataformas y del Gobierno debaten sobre la existencia de este tipo de transporte que, según los taxistas, han ido en detrimento de la movilidad en la capital, pero también les ha traído mayor competencia y menores ganancias.
Al conflicto que los taxistas tienen con la plataforma Uber se suma el cobro de tarifas de taxi por aplicación tecnológica que decretó la Alcaldía de Bogotá. Este sistema remplazará los taxímetros y fijará las condiciones de calidad que deberán tener los vehículos para poder cobrar.
El líder de este gremio, Hugo Ospina, manifestó que esta aplicación significará un gasto más para los taxistas y pide que primero se explique cómo será su funcionamiento, además de realizar un plan piloto teniendo en cuenta que hay algunos taxistas y usuarios que no conocen mucho de estas tecnologías.
La Secretaría de Movilidad de Bogotá anunció que aplicará sanciones a quienes perturben el orden público y la movilidad en la protesta.