La muerte de seis campesinos el pasado jueves en zona rural de Tumaco, le puso precio a la cabeza de quien es señalado por las autoridades como uno de los autores de esta masacre que enluta al pueblo tumaqueño: Jefferson Suárez Toro, alias Cachi o Miguelito.
El vicepresidente de la República, general (r) Óscar Naranjo, declaró a este combatiente como un objetivo de alto valor, sindicándolo de hacer parte de un grupo de narcotraficantes que presionan a los campesinos para oponerse a la erradicación.
Mientras la Fuerza Pública planea la estrategia para dar con el paradero de alias “Cachi”, la investigación sobre los responsables de la muerte de los labriegos continúa. Luego de que la Defensoría dijera que las versiones de los habitantes señalaban como responsables a miembros de la policía, y Medicina Legal, por su parte, planteara que el ataque fue realizado con disparos de larga distancia y proyectiles de alta velocidad, fueron suspendidos cuatro uniformados.
EL COLOMBIANO entrevistó a Cachi:
¿Son disidentes de Farc?
“Nosotros pertenecemos a las Farc. La palabra disidentes no sé cómo la toman ustedes, pero nosotros somos guerrilla que se quedó en el monte, que se quedó fuera de cobertura de los diálogos porque no nos cumplieron. Este frente de guerra, que no es uno, somos varios identificados como Oliver Sinisterra, se quedó por fuera de los diálogos, o mejor, nos retiramos porque estos se volvieron una fachada, y el mismo Estado sabe que ya no hay guerrilla. Los que están dialogando son los comandantes, aquellos que traicionaron la fe de un pueblo, la fe de un guerrillero: 17, 18 años peleando y a nosotros nos echaron como un perro para el monte. Qué nos toca hacer: recogernos, volver a las armas porque no tenemos otra opción, el Gobierno no nos da garantías”.
Pero insisto: ¿son guerrillas, paramilitares o un grupo al servicio del narcotráfico?
“Somos guerrillas, paramilitares nunca nos consideramos y al servicio del narcotráfico tampoco. Se aceptan cosas como que la coca es una fuente de financiamiento porque eso hay que aceptarlo, pero el Estado en vez de combatir al campesino, debe combatir a las cabezas mayores, combatir a los narcotraficantes dentro y fuera del país”.
¿Su grupo tiene alguna relación con el Estado Mayor y el Secretariado?
“Nosotros no tenemos nada que ver con el Secretariado pero sí somos el brazo armado de la columna Daniel Aldana en la que se encuentran los combatientes, la milicia, colaboradores todavía activos”.
¿Lanzaron ustedes los explosivos contra la Policía y la comunidad como lo señalan oficialmente?
“Eso es algo ilógico porque en esa protesta teníamos compañeros, teníamos amigos, teníamos hasta familia. Es algo ilógico que reaccionáramos de esa forma. Hasta ahora no se nos ha pasado por la mente actuar de esta forma”.
Si no es así, ¿por qué fueron señalados como los primeros responsables?
“Porque el Estado nunca ha sido capaz de enfrentar sus errores, siempre brega a tapar. Quiere buscar culpables. Es hora de que el Estado comience a aceptar sus errores, a aceptar que tiene fisuras en la Fuerza Pública. Si quiere un cambio, comencemos desde el Estado y así vamos mejorando este país; pero si el Estado es corrupto, ¿qué buscan? ¿Cómo lo buscan?”.
¿Pero ustedes querían atacar a la Fuerza Pública?
“Nosotros no pensamos atacar a la Fuerza Pública. En ningún momento pasaremos por encima de la población civil porque ellos para nosotros valen mucho. Si ellos piden un alto el fuego nosotros nos recogemos. La población civil dijo: ustedes no se metan que esto es del campesinado, ¿y qué hicimos? la orden a nuestras guerrillas fue no atacar hasta nuevo aviso y así quedamos”.
Los informes hablan de cilindros lanzados. ¿Ustedes los tiraron?
“No tenemos nada que ver. Primero, están hablando de cinco cilindros y donde haya caído una pipeta no hay un solo hueco. Allá están los señores ubicados (los policías). Segundo, los muertos fueron por balas, no por esquirlas; inclusive el Capitán que estaba en la avanzada les colaboró a los campesinos. Gracias a ellos no falleció tanta gente porque todo hay que agradecérselo al Ejército Nacional que dio incluso sus medicinas y se las entregaron a los heridos”.
¿Cómo financian la guerra?
“Para nadie es un secreto que la guerra se financia con impuestos. Siguen, los aportes; el armamento estaba, munición hay, explosivos hay, entonces el costo de esta guerra no es tan alto”.
