El Manchester United no ejercerá la opción de renovación del contrato de Zlatan Ibrahimovic, según informó este viernes la Premier League. El delantero sueco, de 35 años, llegó gratis el pasado verano a Old Trafford después de desvincularse del París Saint-Germain con un contrato de una temporada prorrogable a una segunda.
Según publicó el libro Football Leaks: Die schmutzigen Geschäfte im Profifußball (Football Leaks: La corrupción en el fútbol) las posibles condiciones para establecer esa prórroga eran dos: que el Manchester United acabara la Premier entre los tres primeros o que Ibrahimovic jugara 31 partidos de esa competición. Como el equipo entrenado por José Mourinho sólo pudo finalizar en sexta posición, al delantero sólo lo quedaba completar el mínimo de encuentros y, cuando estaba a punto de lograrlo, se lesionó de gravedad. En su partido número 28 de Premier, con margen para cumplir con la exigencia de contrato, Ibrahimovic se rompió el ligamento cruzado anterior de la rodilla y dijo adiós a la temporada.
El ariete, que pasó por el quirófano el mes pasado para tratarse la aparatosa lesión, inició el proceso de rehabilitación en la ciudad estadounidense de Pittsburgh, donde fue operado. Tal y cómo explicaron los médicos que llevaron a cabo la cirugía, la recuperación exigirá, como mínimo, seis meses. Ibrahimovic, además, no aparece en la lista de «futbolistas retenidos» por los clubes ingleses que hizo pública la Premier por lo que su destino es desconocido.
Según varios medios británicos, uno de los clubes más interesados en hacerse con los servicios de Zlatan es el LA Galaxy, de la MLS estadounidense, donde ya jugaron David Beckham, Robbie Keane, Landon Donovan, Steven Gerrard y Ashley Cole, entre otros. Otros nombres ilustres que dejaran sus clubes este verano son John Terry, que abandonará el Chelsea después de 19 campañas, y Willy Caballero, Jesús Navas, Gael Clichy y Bacary Sagna, quienes ya han confirmado su partida del Manchester City.