El partido de las FARC, nacido tras la desmovilización de esa guerrilla, sufrió ayer un duro descalabro en las elecciones legislativas, su primera cita con las urnas en las que apenas conseguía 52.532 (0,34%) para el Senado con el 99,97 % escrutado.
La Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC) quedaba así como el tercer partido menos votado al congreso, muy lejos del primero, sus grandes detractores el partido Centro Democrático que consiguieron 2.352.875 sufragios.
El resultado fue incluso peor para la Cámara de Representantes 32.636 votos, el (0,21%) del total, lo que le ubica en la vigésima posición entre los partidos que comparecen a ese órgano de circunscripción territorial.
Sin embargo y pese a ese mal resultado, la FARC contará con diez asientos en el Congreso, cinco en el Senado y cinco en la Cámara en virtud del acuerdo de paz que les garantiza esos escaños durante dos legislaturas consecutivas.
De ese modo, Iván Márquez, número dos de la antigua guerrilla y Sandra Ramírez, viuda del fundador de las FARC, Manuel Marulanda, estarán en el Senado, donde se encontrarán con Álvaro Uribe, su acérrimo castigo en la guerra y en la paz.
