Río de Janeiro, 15 mar (EFE).- El Chapecoense brasileño jugará este jueves por primera vez un partido de la Copa Libertadores en su estadio, en un duelo contra el Lanús argentino en el que buscará una victoria con la que daría un gran paso para acceder a los octavos de final del torneo continental.
Los dos equipos llegan en una situación muy diferente al partido: los locales lo hacen cargados de moral tras debutar en la Libertadores la semana pasada en Venezuela con victoria por 1-2 contra el Zulia, mientras que los visitantes se vieron sorprendidos en casa por el Nacional uruguayo (0-1) y un nuevo tropiezo complicaría su futuro en el torneo.
En el Chapecoense, el técnico Vagner Mancini debe repetir el esquema con tres volantes que usó en Venezuela, con el que el conjunto de Santa Catarina se mostró muy sólido y prácticamente no concedió espacios en la retaguardia.
La única variante que podría introducir Mancini en el once inicial con respecto a la semana pasada sería la entrada del delantero Rossi, recuperado de la varicela que le impidió viajar a Maracaibo, en el lugar de Arthur.
El Chapecoense llega al partido tras empatar a cero el sábado contra el Inter de Lages, en partido correspondiente al Campeonato regional de Santa Catarina en el que actuaron los reservas.
El lateral Joao Pedro aseguró en rueda de prensa que el grupo ya se quitó un peso de encima tras hacer su debut histórico en la Libertadores.
«Nos quitamos el peso del estreno en la Libertadores. Son partidos truncados, muy seguidos. Aquí también será así. Sabemos que usarán su estilo de jugar, pero tengo la cabeza buena para soportarlo», dijo Joao Pedro.
Por su parte, Lanús llega al partido necesitado de sumar puntos tras su derrota en casa, si no quiere verse descolgado en el grupo.
El ‘Granate’ perdió este final de semana por 3-0 ante Racing en el campeonato argentino, aunque el técnico reservó a sus titulares pensando en el partido contra el Chapecoense y en el próximo en el campeonato local, ante River Plate.
«No quería arriesgar a nadie porque no tengo tanto recambio. Quería centrarme en el jueves. Creía que jugar cuatro partidos en pocos días se iba a hacer complicado y prioricé el partido por la Copa Libertadores y con River», explicó el técnico, Jorge Almirón.
El entrenador del conjunto porteño admitió que afrontan el partido con «la obligación de ganar y sacar un buen resultado para acomodarnos en el grupo».
La única duda de Lanús es en el lado izquierdo del campo, posición que se disputan Nico Aguirre y Matías Rojas, mientras que el resto de jugadores deben ser los mismos que cayeron en La Fortaleza contra Nacional.