A la hora de emprender, ¿alcanza sólo con tener pasión?
La respuesta es corta y es un «no».
Aunque emprender significa tratar con un ecosistema que es propio, en el que se conectan pasiones, personas, ideas y sueños enmarcados hacia un mismo camino, obtener la victoria y olvidar los fracasos, la pasión no lo es todo.
Sin embargo, eso no desestima la importancia de creer en tu proyecto, porque ese es un factor determinante para potencializar tu emprendimiento.
Pero, la dificultad de transitar un camino nuevo y desconocido sólo se enfrenta teniendo un plan de mercadeo y finanzas, con objetivos y metas claras.
Es importante saber esto antes de empezar, porque es prácticamente imposible lanzarse a correr sin antes caminar.
En este sentido, actualmente abundan en la web decálogos sobre cómo convertirse en un emprendedor exitoso, aunque la verdad es que no existen recetas mágicas en el camino de emprender.
Siempre va a haber altibajos en el camino, puesto que es un proceso plagado de incertidumbres. Sin embargo, hoy contamos con información y herramientas que nos ayudan a bajar esos riesgos.
Apóyate en técnicas como Design Thinking, Lean Start Up o Canvas Business Model.
Estrategias que te permiten poner los pies sobre la tierra y te ayudan a empatizar con tu producto o servicio, además de conocerlo y generar prototipos que te indiquen si tu propuesta de valor realmente resuelve un problema y, en tal caso, si existen clientes dispuestos a pagar por esa solución.
Por último, estos consejos son útiles en la medida que lleves la pasión contigo, porque recuerda que nada te llevará más lejos que eso.